Del 8 al 10 de agosto, Arbo se convirtió en el epicentro gastronómico de Galicia con la celebración de la Festa da Lamprea Seca de 2025.
Un evento que, en su XXX edición y con el reconocimiento de Fiesta de Interés Turístico de Galicia, volvió a demostrar que la tradición, el sabor y la hospitalidad pueden ir de la mano.
Este año, nosotros estuvimos allí, acercando nuestros vinos D.O. Rías Baixas a todos los visitantes que se dejaron tentar por la reina del río Miño.
Un maridaje perfecto
La Carballeira de Turbela fue el escenario donde la lamprea seca se presentó en sus más deliciosas formas: asada, rebozada, rellena o con fideos.
Cada plato tenía su historia, y todos encontraron un aliado perfecto en nuestros vinos, creando maridajes que sorprendieron incluso a los paladares más curiosos.
Porque si algo nos gusta es acompañar la tradición con el carácter fresco y elegante del Albariño.
Tres días para los cinco sentidos
La fiesta comenzó el viernes con degustaciones al caer la tarde y música en vivo —el Grupo Nevada y una discoteca móvil hicieron bailar a Arbo hasta la noche.
El sábado fue un día para vivirlo todo: rutas de senderismo con “Os Camiños da Lamprea”, feria artesanal, visitas guiadas al Centro “Arabo”, actividades para peques y, como colofón, las actuaciones del grupo Treixadura.
El domingo cerró el evento con una bicicletada, más gastronomía, folclore, y el sonido de la banda de acordeón “A.C. O Son do Acordeón” que sirvió de broche de oro.
Arbomostra: escaparate del Condado do Tea
En paralelo, se celebró esta feria agroindustrial y artesanal donde se pusieron en valor los productos de la zona.
Allí, la lamprea compartió protagonismo con otros tesoros de la comarca, como nuestros vinos, embajadores de un territorio que sabe a tradición y a futuro.
Un brindis por la tradición
Nuestra experiencia en este evento fue mucho más que una degustación: fue un encuentro con la historia, la gente y los sabores que nos definen.
Nos sentimos afortunados de haber formado parte de este homenaje a la tierra y sus productos, y de haber brindado con todos los que se acercaron a nuestra mesa.